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sábado, 4 de enero de 2014

MIS CARTAS ELEGIDAS






 
A sus Altezas Reales los Reyes de Oriente.
Queridos Reyes Magos:
Otra vez ha llegado el momento de compartir con vosotros las sensaciones del año que acaba y haceros llegar mis deseos para el que va a comenzar.
Sí. Ya sé que mis anhelos no son fáciles de complacer y que por eso tardáis tanto en hacerlos realidad.
Una noche del pasado agosto me llegó, por fin, la estrella que os pedí hace once años. ¡Gracias!. ¡Es preciosa con el nombre de mamá brillando en ella!. Ha merecido la pena esperar. Ahora sé que ya me queda menos para recibir el lucero de papá, aunque intuyo que la lista es muy larga cuando se trata de acercarse a quienes se fueron.
Mientras llega, sigo disfrutando, en los días lluviosos de primavera, de la franja azul celeste del arco iris. ¡Qué buena idea identificar a cada recién nacido con un color!.
El de mi hijo combina deliciosamente con el rosa de su compañera de vida. Ojalá no se decoloren jamás y ganen en intensidad con el paso de los años.
Así ha sido con el amarillo y el verde que matizan mi vida y la de mi marido, después de tantos años están resplandecientes.
En cuanto a mis peticiones para el próximo año, como soy muy afortunada, este año tampoco voy a pediros nada para mi, prefiero, con mis deseos, enviar algo de esa fortuna a quienes la necesitan más que yo.
Deseo:
Que se reparta la riqueza que Dios creó en nuestro planeta, equitativamente, entre todos y cada uno de sus habitantes. Vivan donde vivan.
Que sano sea el estado natural de nuestro cuerpo y de nuestro espíritu.
Que siempre tengamos cerca a alguien que nos susurre una palabra de aliento, de cariño en los momentos difíciles sobre todo cuando cuando nos hagamos mayores, para que la soledad no se convierta en nuestra única amiga.
Que ni un sólo día falte el pan en la mesa de los hombres para que ninguno vea a su familia pasar hambre.
Que la sonrisa se adueñe del rostro de los niños y quede grabada en él para toda su infancia y cuando la infancia se acabe.
Como veis, son los mismos deseos que os hago llegar año tras año pero que, hasta ahora, no he visto cumplidos.
Quien sabe... tal vez sea en este en el que se hagan realidad.
Y ya me despido por este año con la esperanza de que, en la carta del siguiente, pueda daros las gracias por vivir en un mundo más justo, equilibrado y limpio.
Con todo mi cariño, 
Belén.
Me ha gustado por su sencillez y poética.
Queridos Reyes Magos: A decir verdad, hace mucho, mucho tiempo que no os escribía.  Puede que mi última carta os la enviase con nueve o diez años. Seguro que en ella os pedía lo que cualquier crío de esa edad y esa época: juguetes, juegos, una bicicleta..., petición que nunca fue correspondida o si se hizo, fue con juguetes muy inferiores a los demandados por mí. Tal vez por eso os dejé de escribir. No comprendía que yo, un niño bueno donde los hubiera, (os lo prometo), no fuese recompensado como al resto de mis amigos del barrio.
Han pasado los años casi sin darme cuenta. Me hice adulto, me casé, tuve hijos y me olvidé de vosotros; así, sin más. Reconozco que según fui creciendo se fue desvaneciendo en mí esa magia, esa chispa, que tenía la navidad en la infancia. Pero ahora, no sé exactamente por qué, vuelvo a escribiros para pediros unos cuantos regalos por si, conocedores de mi trayectoria, tengo suerte y algo me dejáis. Ya, ya lo sé, no lo puedo evitar: pertenezco a esta parte del mundo consumista que todo lo devora. Por eso pido un montón de productos de consumo. A mi favor diré, aunque sé que puede sonaros a excusa, que sigo siendo el mismo niño bueno de mis diez años pero en versión grandota y que todo lo que pido no me importará compartirlo con los demás. Así que, queridas majestades de Oriente, aquí os dejo mi lista:
- Un detector láser de amigos falsos.
- Un espejo de baño con sonrisa incorporada.
- Un teléfono móvil (me da igual la marca), que      comunique con los seres queridos que ya no están.
- Un ambientador devora-rutinas para mi hogar.
- Un libro donde el autor garantice que será para mí           imprescindible de por vida.
- Una película interactiva donde puedas cambiar la trama   a tu gusto, e incluso poder tener un papel estelar en       ella si estás de bajón.
- Una colección de CDs que, según tu estado de ánimo,      suene una canción distinta para cada día.
- Un reloj de pulsera con alarma que te avise cuando tu     pareja, afectivamente, te necesita.
- Un hidromasaje para activar la fuerza de voluntad.
- Un maletín de primeros auxilios contra la apatía, la           tristeza y cualquier herida del alma.
- Una cámara digital que capte la estupidez humana y la      mala gente. Bueno, vale, si la cámara es muy difícil de    encontrar no os molestéis demasiado que ya me las        ingeniaré yo para distinguir a los indeseables.
Puede que me haya pasado pidiendo. Igual, queridos Reyes Magos, os doy la impresión de ser un tipo muy egoísta. Si creéis que es mucho, no tenéis tiempo o alguien más necesitado os pide, qué sé yo, cosas como un pase anti-vallas de fronteras (para las vallas tipo Melilla), un filtro universal para el cambio climático, una burbuja protectora contra la violencia de género, un spray revelador de políticos corruptos de efecto inmediato, un transformador de videojuegos juveniles en libros o películas, etcétera, os puedo eximir de mi extensa lista de regalos. Es más, si observáis que hay demasiados niños por el mundo que han pedido juguetes y teméis que no haya para todos ellos, os ruego que atendáis primero a esos niños. Visitad también a los ancianos que se sientan solos en cualquier día del año y dejadles alguna sorpresa que les saque una sonrisa. Insisto en que primero colméis de regalos a los niños y los ancianos. Si vuestra magia no llega para todos, por favor, tacháis toda mi lista y prefiero que os volquéis en ellos. Con que facilitéis que alguien me dé un abrazo sincero en el 2014 estaré más que satisfecho. Os aseguro que me va a hacer tanta ilusión o más que los regalos.
Gracias por leer mi carta.
Abrazos para los tres de Mos (especialmente a Baltasar que siempre fue mi preferido).
Postdata: En El Corte Inglés y en Carrefour no tienen nada de lo pedido en mi lista. Tampoco en Amazon. Lo digo para ahorraros tiempo y que no tengáis que ir hasta allí.
© Ceferino Otálora (Mos)
    Diciembre de 2013

 Me ha gustado por su profundidad de pensamiento y por su claridad.



6 comentarios:

  1. Felicitaciones a tus elegidos y ti por tu carta, cada una tiene su encanto y era dificil elegir.

    Feliz año 2014.

    Un beso.

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  2. Qué alegría ver mi carta publicada en tu casa!.
    Yo he publicado mi elección con un día de retraso debido a que estaba programada pero no se publicó.
    La elección ha sido recíproca porque yo he elegido la tuya que me ha llegado muy dentro.
    Gracias por haber aparecido en mi vida.
    Felices Reyes!.
    Besos.

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  3. Gusto en ver tu carta junto a la mía en casa de Belen Rodriguez, opino que nuestros estilos se asemejan, o eso me parece a mi.
    Mi enhorabuena con total sinceridad¡¡

    Besos amiga y ricas risas para y por siempre ♥♥

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  4. Hola !!!!
    Qué maravillas de cartas, este reto ha estado genial, acercándonos a nuestros sueños y conociéndonos más entre nosotros, me alegro de conocerte.
    Un abrazo !!!!

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  5. Perdón, Menchu, por llegar algo tarde y encontrarme con la elección por tu parte de mi carta.
    Te lo agradezco de veras.
    Todas las cartas hablan de sus autores y sus temores, carencias, deseos. Todas son ganadoras en humanidad.
    Me voy contento de leerme en tu casa.
    Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.

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  6. Me encantan esos deseos que son de tan buenas personas :)

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